La más fuerte

Sábado de teatro.

"XY autobiografía en dos cuerpos"

Un espacio: la intemperie.
Una imagen: dos mujeres, X e Y, frente a frente.

La imagen se transforma en la de una mujer asechada por su doble, un misterio y el fantasma de aniquilación. 

“XY (autobiografía en dos cuerpos)” , versión libre de Mariano Dufour de la obra “La más fuerte” de August Strindberg, es una pregunta incesante e inquietante sobre la otredad, los modos de pensar y sentir en relación con ese “otro” que hay en uno.

La obra me conmovió. 

Una, el deber ser, el ego domesticado, que discursea, que habla y por momentos no se le entiende, se descontrola aunque ella tan impecable.

La otra, salvaje, honesta, equilibrada...

"Acá estoy.
Pescado colgado cabeza abajo, metido en un balde apretado, en silencio.
Algo se precipita.
Allá está la niebla. acá no hay nada…
El texto habla.
Mi nombre es... no importa, supongamos que soy X, un punto en el espacio, el interior de una criatura feroz."

Escena:

El ego le reclama: "nunca te llevaste bien con mi marido hasta que te pusiste de novia y ahí hubo un acercamiento entre ustedes, una amistad. Yo no estaba celosa, porque pensé que tal vez estaban saliendo afuera los sentimientos escondidos..."

Otra escena:

Ellas sincronizadas, apasionadas, bailando la canción de Camilo Sexto "Ya no puedo más". Fue el único momento en que las dos fueron una. Alegres, vivas.

Fuí una espectadora de esta lucha, de estos reclamos, de esta histeria y este fluir. 

Las miraba de afuera, enmarcadas en el arte del teatro, donde cada gesto corporal se magnifica para llegar hasta el espectador y tocarlo.

Muchas escenas se me vienen a la mente. Me encantaría plasmar cada una de ellas porque cada detalle tenía su mensaje. 

Aquí les presento la última:

El ego domesticado, llorando, gritando que ella creía ser la más fuerte de las dos (si, así ha sido desde que lo conozco), despidiendose de su hermana a quien rogó, presionó, hasta quiso matar y finalmente despidió diciendo...

"gracias por enseñarle a amar a mi marido,

yo me voy a quererlo un poquito"

Aplausos por favor...

PD: la interpretación de la obra es mía, mía y mi alma. 

Tal vez nada se acerca a lo que quisieron transmitir los protagonistas, sólo les dejo aquí mi mirada de espectadora.